Actualizado el miércoles, 30 octubre, 2024
¿Verdad que si hablamos de promociones automáticamente se nos vienen a la cabeza los descuentos? Pero lo cierto es que hay todo un mundo más allá. En este post te hablaremos de ejemplos de promociones para incrementar las ventas sin que supongan necesariamente una rebaja en el precio de tus productos o servicios.
Las promociones son una de las herramientas básicas para cualquier comercio, sea físico u online, que a menudo se utilizan para llamar la atención del público objetivo, reducir el stock o hacer frente a la competencia.
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Ventajas e inconvenientes de los descuentos
Seguro que las ventajas ya las conoces de sobra: aumento de las ventas, captación de nuevos clientes, liquidación de stock, etc. Los descuentos están bien para:
- Dar a conocer tus productos o servicios durante su etapa de lanzamiento o para incentivar a probarlos. Es especialmente interesante para servicios que tienen una suscripción mensual, por ejemplo, al ofrecer gratis solo el primer mes.
- Premiar a clientes que llevan tiempo contigo, o intentar despertar el interés en aquellos que llevan mucho sin comprar. El email marketing puede ayudarte en esto.
- Deshacerte de productos de otras temporadas o que no han tenido el éxito que esperabas. En el sector de la moda y en el alimentario es muy común.
- Fechas muy vinculadas al consumo, como son las rebajas o el Black Friday. También para celebrar alguna efeméride concreta, como el Día de la Madre o del Padre, San Valentín, etc. Todo depende de lo que encaje mejor con tu negocio.
Ahora bien, ¿has pensado en sus inconvenientes?
El primero, evidentemente, es que el margen de beneficio que te llevas por cada venta es menor. Es importante que cuando hagas un descuento tengas clara la cantidad que vas a dejar de ganar y el tiempo durante el que puedes permitirte ofrecer esa rebaja.
Otra cuestión a tener en cuenta es que atraerás a nuevos clientes, sí, pero ese descuento no será suficiente para fidelizarlos. Es más, si el producto no cumple con sus expectativas, es muy probable que se queden con la sensación de que lo barato sale caro. En este otro post te hablamos de algunas acciones que puedes llevar a cabo para retener a tus clientes a través de un buen servicio de post venta.
También puede ocurrir que si tienes tus productos en promoción constantemente tu público empiece a preguntarse cosas como: ¿es que no es de buena calidad? ¿Me valdrá la pena pagar un poco más en otro sitio? Este tipo de asociaciones no le convienen a tu marca, por eso no es conveniente abusar de los descuentos.
En resumen, los descuentos a destiempo pueden generar un efecto contrario al deseado para tu negocio. La clave está en fidelizar a todos esos compradores a los que has captado para que se conviertan en clientes habituales.
Ejemplos de promociones sin usar descuentos
¿Y si no hacemos descuentos, qué hacemos? Pues tienes variedad de alternativas para combinar, y muchas de ellas se basan en el FoMO (Fear of Missing Out). El síndrome FoMO no es más que el miedo que tenemos los compradores a no aprovechar esa oferta que tanto nos interesa, o a que alguien se nos adelante y se lleve el producto que queríamos.
En este post te hablamos más detenidamente del FoMo y de cómo puede ayudarte a generar urgencia en la compra dentro de tu tienda online.
Ahora sí, vamos allá con los ejemplos de promociones:
1. Tiempo limitado
Haz que la promoción pueda disfrutarse solo durante un periodo de tiempo, incluso puedes incorporar un contador en tu tienda online que indique cuántas horas y minutos le quedan vigentes. Así incitas a tus clientes potenciales a tomar la decisión de compra más rápido. Por ejemplo: “Solo hoy, gastos de envío gratis”.
2. Ediciones limitadas
Si en tu negocio tienen cabida, adelante. Por ejemplo, si tienes una tienda de ropa y sabes que hay un diseño concreto que va a causar furor, puedes lanzar al mercado solo 30 unidades. Esta es una estrategia que puedes replicar cada cierto tiempo.
3. Precios por volumen
Prueba a establecer diferentes rangos de precios, en función del volumen de productos que compren tus clientes. Por ejemplo, si alguien compra 5 unidades, puedes estipular un precio menor por unidad que si se compran solo 2.
4. Envío o devolución gratuitos
Es uno de los factores en los que más nos fijamos cuando compramos online. Puedes incluir el envío y/o la devolución gratuita en tu tienda para compras superiores a un determinado valor.
5. Más tiempo de garantía
Otro de los ejemplos de promociones que no incluyen ningún descuento. Sobre todo en productos tecnológicos, es algo que se agradece y mucho. Alargar la garantía de tus productos durante un tiempo puede generar una percepción de calidad.
6. Valor añadido
No te quedes solo en el producto. Por ejemplo, imagínate que tienes una web de cosmética. Para una determinada gama de productos puedes regalar gratis una consulta de 30 minutos con un experto que te enseñe a sacarle el máximo partido.
La asesoría por parte de un profesional va bien para casi todos los productos del mercado.
7. Una unidad de regalo
Si te interesa que el comprador pruebe un determinado producto, puedes aprovechar para regalarle una unidad o una muestra del mismo con cada compra que haga a partir de un gasto concreto.
8. Tarjeta regalo
También muy común, es genial para fidelizar clientes. Piensa por ejemplo en aquellos que llevan contigo más de 5 años, o que gastan en tu negocio “x” euros al año. Una tarjeta regalo para que compren otros productos puede ser un buen obsequio.
9. Puntos con cada compra
Permite que tus clientes acumulen puntos por sus compras. El volumen de puntos obtenidos ha de ser proporcional al gasto en la tienda, claro.
Estos puntos podrían gastárselos en futuras compras en tu ecommerce, o podrías establecer alguna colaboración con otra marca del sector para llevar a cabo una relación win-win, en la que ambos ganéis. Por ejemplo, que los puntos que acumule el cliente por reservar en tu hotel pueda gastarlos también en una empresa de coches de alquiler, y viceversa.
10. Sorteos
Para que con cada compra que haga tu cliente en la tienda online, entre en el sorteo de un determinado producto o servicio. Lo habitual es que a más dinero gastado, más participaciones se lleve.
De extra: utiliza el copywriting
El copywriting es una disciplina fundamental para atraer a tus clientes potenciales a tu web e impulsarlos a que finalicen su compra. Dos trucos muy sencillos de aplicar:
- Unidades limitadas: si el comprador sabe que habrá productos de sobra, va a tomarse la compra con más calma. Es bueno que por debajo de un número determinado de unidades, por ejemplo cuatro, digas en tu web cuántas te quedan disponibles. Es una forma de explotar el principio de escasez y de alentar el FoMO del que hablamos al principio.
- “Otras personas están viendo esto”: también es otra forma de generar urgencia. Los comparadores de hoteles lo utilizan a menudo en sus webs para animarnos a reservar lo antes posible.
Aquí te dejamos otros trucos de copywriting que seguro que te van a venir bien.
Esperamos que le saques mucho partido a estos 10 ejemplos de promociones que no son descuentos. Seguro que a ti se te ocurren muchas otras, así que te leemos en los comentarios 🙂
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