Metodología Lean

Metodología Lean: mejora la productividad de tu negocio

|

Tiempo de lectura: 3 minutos

Actualizado el viernes, 26 enero, 2024

¿Tu negocio no es todo lo eficiente que te gustaría? Te explicamos cómo mejorar la organización y los procesos productivos con la metodología Lean.

Metodología Lean

Ser eficiente en nuestro negocio no siempre es sencillo. Una mala organización del trabajo puede propiciar un consumo ineficiente de los recursos empresariales.

Para luchar contra esto, existen diferentes técnicas, y una de las más conocidas y utilizadas es la metodología Lean. ¡A continuación te contamos en qué consiste!

Historia de la metodología Lean

Los inicios de la metodología Lean tienen su origen tras la segunda guerra mundial, en Japón, donde el equipo técnico de la empresa automovilística Toyota diseñó una estrategia para mejorar su sistema productivo siguiendo unas pautas básicas:

  • Eliminar las posibles interrupciones o desperdicios
  • Identificar las sobrecargas parar evitar que ralenticen el proceso

Con estas premisas, consiguieron mejorar su producción y volver su empresa mucho más eficiente, hasta llegar a ser una de las mayores compañías del mundo, y que se mantiene como tal en la actualidad.

De la misma forma, sentaron las bases para este nuevo sistema de gestión de proyectos que se conoce como Lean, y que ha influido considerablemente en otras técnicas como son Agile o Scrum.

¿Qué es la metodología Lean?

La metodología Lean consiste en ajustar la producción para que utilizando el mínimo de recursos, el cliente consiga el máximo valor.

Para conseguirlo, el punto clave es la detección y eliminación de “desperdicios”, entendiendo como tales cualquier recurso sobrante, gasto, interrupción o pérdida de tiempo.

Aplicando esta técnica a todos los niveles desde el inicio del proceso productivo y haciendo partícipes a todos los empleados, se consigue multiplicar la eficiencia productiva.

¿Vas a montar un negocio online? Aquí te resumimos las mejores prácticas para emprender online con éxito.

¿Cómo puedo aplicarlo en mi negocio?

Para aplicar la técnica Lean, la clave es seguir en la medida de lo posible estos principios básicos:

  1. Elimina los desperdicios: identifica y elimina cualquier elemento que no sume valor al producto o servicio final. Como adelantamos antes, esto incluye la eliminación de procesos innecesarios, tiempos de espera, costes excesivos, malgasto de materiales, etc.
  2. Crear valor para el cliente: intentar comprender las necesidades del cliente para proporcionar productos o servicios que agreguen valor desde su perspectiva. Es decir, ajustar los procesos para entregar lo que el cliente realmente valora.
  3. Flujo de trabajo continúo: optimiza el flujo de trabajo desde el inicio hasta el final, minimizando los retrasos y obstáculos que puedan surgir durante el proceso. El objetivo es que el flujo de trabajo sea continuo y eficiente.
  4. Producción Justo a Tiempo (JIT): producir y entregar productos o servicios solo cuando se necesitan, ni antes ni después, para minimizar el almacenamiento y reducir los costes. Algo que no se produce, no consume recursos.
  5. Mejora continua (Kaizen): fomenta una cultura de mejora constante, donde todos los empleados participen en identificar oportunidades de mejora.
  6. Respeto por las personas: reconoce el valor de cada individuo dentro de la organización y promueve un ambiente donde se fomente la participación, la colaboración y el desarrollo personal y profesional.
  7. Liderazgo comprometido: los responsables del negocio deben comprometerse con la metodología Lean y proporcionar el apoyo necesario para llevarla a cabo.
Icono proceso de trabajo

En definitiva, comienza analizando tus procesos, detecta las mejoras, haz partícipe a tu equipo en todo momento y planifica todos los posibles cambios.

Empieza siempre a pequeña escala, con cambios simples, y poco a poco puedes ir transformando tu negocio para hacerlo más eficiente.

Beneficios

Un negocio que realice una buena inmersión en el sistema Lean, puede lograr un rendimiento mucho más efectivo con los siguientes beneficios:

  • Aumento de la productividad: sin desperdicios, la producción será más eficiente.
  • Reducción de costes: te evita hacer gastos innecesarios o sobrecostes derivados de la mala organización.
  • Simplificación de procesos: una producción más sencilla es más fácil de llevar a cabo y requiere menos recursos.
  • Flexibilidad y capacidad de respuesta: al simplificarse la producción nos permite ser más ágiles para responder al momento.
  • Mejora la toma de decisiones: al tener claros los flujos de trabajo y la política de anti-desperdicios es más fácil ponerse al mando.
  • Mayor implicación del equipo: haciendo partícipes a todos en las decisiones y dejando participar activamente en las propuestas de mejora.
  • Mejora de la calidad del producto o servicio: poniendo el foco en el valor que queremos conseguir y aunando esfuerzos, el resultado debería ser un cliente más satisfecho con nuestro producto.

Desventajas

Por supuesto, no hay pros sin contras. Aunque el concepto que predica Lean en sí es bastante sencillo —mínimos recursos, producción ajustada y mayor valor—, llevarlo a cabo no es tan fácil de conseguir.

Depende mucho del modelo de negocio que tengas. No siempre es asumible para todos cambiar los procesos, y en muchos casos, los “desperdicios” no son fáciles de detectar. Por eso, con la técnica Lean en mente, la clave está en buscar el equilibrio que nos permita acercarnos al máximo.

¿Qué te parece esta técnica? ¿La has puesto en marcha en tu negocio? Te leemos en los comentarios si nos quieres contar tu experiencia 😉


Avatar de Marta Mariño

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Newsletter

Suscríbete y recibe periódicamente consejos muy útiles para tu web y ecommerce 🙂 Además, te regalamos
3 guías
: Digitalización, WordPress y Ciberseguridad.

Conviértete en afiliado

Gana dinero recomendando dinahosting a todo el mundo.