Actualizado el jueves, 22 junio, 2023
Laura Esse es diseñadora web y confía en dinahosting para su presencia online.
Se ocupa de la identidad visual y de la web de tu proyecto, para que tu imagen sea coherente contigo y conectes con tu público.
Emprender es de valientes. ¿Cuándo decidiste que este era el mejor camino?
Todo llegó de una forma bastante natural… Cuando terminé de cursar Gráfica Publicitaria en Madrid y después un año trabajando en un estudio de diseño donde realicé mis prácticas, empezaron a surgir pequeños encargos y colaboraciones.
Es verdad que en ese momento vivía en casa de mis padres y mis ingresos no tenían que pagar las facturas, así que, eso de diseñar, me lo tomaba más como un juego que otra cosa. Pero me sirvió para afirmar que lo que quería era trabajar por mi cuenta.
Unos años más tarde, después de pasar una larga temporada en Inglaterra, volver y ampliar mi formación en diseño web, los encargos se volvieron más frecuentes y entonces me di cuenta de que eso de <<emprender>> ya era una realidad.
He de reconocer que no lo medité demasiado, ni me organicé bien: en el mismo mes decidí independizarme y darme de alta como autónoma. Así, a lo loco. Con muy pocos ahorros, sin ninguna rutina de trabajo y con un nivel muy muy básico sobre gestión de negocios. Tenía todas las papeletas para tener que echar el cierre en muy poco tiempo… pero 4 años y pico después, aquí sigo.
¿Qué tipo de cliente contrata tus servicios?
A lo largo de este tiempo he trabajado tanto para agencias como para cliente final, pero ahora realmente estoy enfocada en pequeños y medianos emprendedores con un perfil creativo que quieren desarrollar la identidad visual de su proyecto y/o que necesitan una web para lanzarse al mundo online. Su actividad profesional no es indispensablemente creativa pero sí tienen una sensibilidad por el diseño y el cuidado del detalle.
Yo los llamo creadores. Me gusta más definirlos como creadores que emprendedores porque están moldeando su pequeña (gran) idea, un universo propio que pretenden convertir en su estilo de vida.
¿Cuál crees que es tu factor diferencial?
Sin duda creo que es la sensibilidad y la pasión con la que ejerzo mi profesión, que es totalmente vocacional. Me implico en el proyecto de mi cliente como si fuera el mío propio, llevando a cabo una profunda escucha y análisis hasta que me aseguro de comprender su esencia. Para que este resultado sea positivo, procuro que el trato con mis clientes sea muy cercano, así se trabaja mucho más a gusto 🙂
Por otro lado, y sin imponer esto sobre los intereses de mis clientes, intento, en la medida de lo posible, ser fiel a un estilo de diseño genuino y que sea, poco a poco, más reconocible.
¿Qué es lo que más te ilusiona de tu profesión?
Sin duda el ayudar a otros profesionales a construir las bases gráficas del proyecto basado en su pasión. Formar parte de su aventura, antes de que empiece a ser, simplemente ordenando visualmente una serie de ideas. Al fin y al cabo, mis clientes están viviendo un proceso por el que yo he pasado y poder ayudarles mínimamente en esto es lo que me mueve.
Hay veces que el proceso de trabajo es más complicado y se hace cuesta arriba… pero cuando se ve terminado lo celebro como si fuera el primero y se me olvidan las jornadas de trabajo interminables. Y me fascina cuando pasa el tiempo y compruebo que mis clientes siguen viviendo de su sueño.
Cada proyecto es un mundo. ¿Cómo distribuyes tus tiempos de trabajo?
He de reconocer que me ha costado mucho tiempo llegar a tener una rutina de trabajo estable. Me considero una persona muy poco constante así que me he tenido que concienciar a fondo para conseguirlo.
Aunque una de las mayores ventajas que tiene el ser autónomo es la libertad de horarios y de ubicación, si no eres una persona disciplinada, este beneficio se puede volver en tu contra. Yo empecé trabajando desde casa. Mejor dicho: desde mi habitación, en pijama y sin peinarme. Seguro que esta escena os suena. Me levantaba tarde y me acostaba MUY tarde, interrumpía el trabajo para poner una lavadora, o para ver el último capítulo de la serie de turno o para ordenar el cajón de mis calcetines. ¡Cualquier excusa era genial para posponer el trabajo! Era la reina de la procrastinación.
Un día, unos amigos me propusieron hacerme un hueco en su pequeña oficina por un módico precio y esto cambió mi chip totalmente. Cuando me instalé allí, decidí establecerme un horario de trabajo de 9h a 18h. Me permito la flexibilidad de tener los días/horas libres a mi gusto o de trabajar desde casa o desde otro lugar cuando considero, pero he de reconocer que cuando trabajo desde mi oficina el resultado es más productivo.
Además, últimamente me ha ayudado a mejorar bastante este tema la mentoría de Ibon Azkoitia, mi Sensei de la Productividad. Me ha enseñado a utilizar un gestor de tareas (Asana) donde detallo muchísimo cada tarea. Además de dedicar tiempo a los proyectos de mi clientes, procuro bloquear cada día algo de tiempo para las tareas propias de gestión de mi negocio, como la contabilidad, el mantenimiento de mi web y redes sociales, etc., y también para la continua formación y la búsqueda de inspiración.
¿Qué le dirías a alguien que está pensando en ser freelance?
Mentiría si digo que todo ha sido super guay y que no he vivido más que alegrías al tomar esta decisión. En realidad, de las pocas cosas buenas que tiene el trabajar como freelance es LA LIBERTAD, y creo que dependiendo del valor que se le de a esto, te sentirás más satisfecho/a o menos con este nuevo estilo de vida.
Desde mi punto de vista y después de haber vivido esta situación durante 5 años tengo bastante claro algunas de las facultades que ha de tener una persona que quiere emprender un negocio: paciencia, perseverancia, buena capacidad de improvisación y saber gestionar muy bien la frustración. Si tienes todas estas te va a ir mejor, pero si no… ¡sin dramas! Yo tampoco las cumplía todas, y te puedo asegurar que se pueden ir mejorando poco a poco.
También diría que, aunque haya que ser bueno/a improvisando y en buscar soluciones, es importante TENER UN PLAN. Medita cuáles son tus objetivos y qué vas a hacer para conseguirlos (a corto, medio y largo plazo). Si defines bien unas metas verás que avanzas más rápido que si vas dando palos de ciego sin saber qué quieres conseguir. Parte del plan debe ser reunir un colchón económico con el que contar en los momentos más flojos de trabajo. Como os he contado, yo no lo tuve y mi vida habría sido muuuuucho más sencilla con él.
Spoiler: a partir del momento en el que des el paso para convertirte en freelance, prepárate para aburrir a tus familiares y amigos con este tema, no podrás hablar de otra cosa. El modelo 303 o las ocurrencias de tus clientes protagonizarán el 85% de tus conversaciones. Es probable que las personas de tu círculo más cercano no lleven este estilo de vida y no te sientas comprendido, así que intenta no frustrarte y entra en contacto con personas que están en tu misma situación. Con ellas podrás compartir logros y derrotas de una forma mucho más positiva.
En cuestión de diseño, ¿qué marcan las tendencias para 2019? ¿Les haces caso o te fías más de ti misma?
La culminación y La muerte del Milennial Pink. Aunque hasta el año pasado no empezó a tener verdadera importancia, este color ya lo explotaron antes otros como Wes Anderson en Gran Hotel Budapest (2014).
Después de ver este color por todas partes, postulándose como el nuevo tono andrógino de nuestro tiempo, veremos cómo empieza a perder fuerza y necesitaremos dejar de emplearlo para diferenciarnos con nuestros diseños.
Nuevas formas femeninas. En 2018 ya se empezaron a romper muchos estereotipos sobre la mujer y vimos el cambio en cómo son representadas. Ahora los ilustradores se animan a representar mujeres empoderadas e imperfectas inspirándose en el expresionismo de Matisse.
Los degradados. Gracias a la mejora tecnológica de las pantallas y a la posibilidad de aplicarlos con HTML5, el uso de los degradados de color va en aumento. Tanto es así, que hemos vuelto a verlos incluso en el diseño de logotipos.
La simplicidad. Este enfoque minimalista del diseño parece totalmente necesario y va en auge, ya que vivimos rodeados de dispositivos y de aplicaciones aportándonos continuamente información.
Las tipografías con serifa. Estamos experimentando un cambio hacia la sofisticación en el ámbito de la tipografía. Después de un tiempo en el que la tipografía de palo seco era símbolo de elegancia y limpieza, ahora utilizamos la tipografía con serifa para aportar carácter a nuestras composiciones.
El movimiento. Hoy en día, las redes sociales nos permiten compartir y consumir vídeos constantemente, y las marcas no han podido desaprovechar este soporte. Ahora, el diseño en movimiento está totalmente integrado en el branding y no solo lo veremos en pequeñas piezas sociales o en spots publicitarios, sino también en la propia navegación web con transiciones, efectos de scroll o mouseover.
Creo que no suelo aplicar las tendencias actuales a un diseño de una forma totalmente consciente “le doy este estilo visual porque es lo que se lleva ahora”. Pero sí me gusta estar bien informada de lo que se hace hoy por hoy en diseño, cine, interiorismo, artes plásticas, etc., y esto me inspira continuamente a la hora de trabajar.
¿Dónde te gustaría verte en el futuro?
Si soy sincera, esta pregunta siempre me ha dado mucho miedo. ¡Ni siquiera sé dónde me gustaría verme el mes que viene!
Me gustaría verme con las mismas ganas o incluso más de seguir con este proyecto adelante y descubrir, al mirar hacia atrás, que he aprendido mucho más de lo que nunca habría pensado.
Pero no nos vamos a mentir, todo esto me gustaría verlo desde mi hamaca con vistas al océano 🙂
En dinahosting nos haría mucha ilusión acompañarte. ¡Siempre a tu lado 24/7!
Esta entrevista ¡me ha encantado! Sois lo más, siempre me habéis demostrado una atención y servicio insuperables y os estoy muy agradecida.
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